domingo, 27 de septiembre de 2015

James Bond: Goldeneye

Estimados Lectores:

Octubre del terror está sobre nuestras cabezas ya, y naturalmente, no alcanzaré a revisar todo James Bond de una tirada antes del estreno de SPECTRE porque Octubre estará plagado de zombies y asesinos enmascarados. Eso, por supuesto, ya lo sabíamos desde que comenzamos esta interminable maratón, así que, tal como explique en la reseña de Dr. No, me estoy saltando algunos Bond en el tiempo para llegar directamente al James Bond con el que yo crecí: Pierce Brosnan. Eventualmente volveré a Dalton y Moore, pero me resulta particularmente interesante hablar de quien por muchos fue para mí el único James Bond, y como resulta en contraste ahora que ya he conocido a parte del resto de la familia. ¡Y comenzamos con Goldeneye!

Nadie se dará cuenta que saque esa imagen de cualquier parte por el uso del Reloaded, jijiji


Título Original: GoldenEye
Año: 1995
Director: Martin Campbell

Goldeneye es una película bastante importante dentro de la saga Bond. No porque su trama represente un giro importante de creatividad o porque sea un hito, un mega logro cinematográfico, sino más bien porque marca el fin de una larga batalla legal para seguir haciendo películas de James Bond. Mírenlo así: hasta este punto, todas las películas de 007 habían salido con cortos espacios de tiempo entre ellos, siendo lo más lejano por 3 años. ¡3 años! Y de pronto, durante la guardia de Timothy Dalton, quien solo llevaba dos películas usando el traje de Bond, comienza una batalla legal de absurdas proporciones que se extendió por más de 6 años. 

Ahora, ustedes deben estar pensando, "Farfaramir es abogado, ¡de seguro el puede explicarlos!". Uno, no, no están pensando eso, lo inventé porque nadie pensaría algo tan ñoño. Dos, cuando digo "batalla legal de absurdas proporciones", quiero que se lo tomen de forma bastante literal. Es ABSURDA. Básicamente MGM se agarró con otra compañía que también tenía los derechos y que quería venderlos... Podría estar horas. 

Cuento corto: finalmente Dalton renunció y Brosnan tomó su lugar en la primera James Bond en no estar basada directamente en ninguna de las obras de Ian Fleming. ¡Se imaginarán el desafío! ¡Desde 1962, todo lo que se había hecho de Bond, incluso Never Say Never Again, provenía de un solo material! Era hora de improvisar, de crear una amenaza nueva e innovadora, una que jamás habíamos usado en una película de James Bond a la fecha... UN SATÉLITE GIGANTE ASESINO EN EL ESP... Wait. 

Y el joven Sean Bean comenzaba una larga carrera de no morir en sus películas (?)

Bueno, en realidad, es más complejo que eso: mientras vigila a una agente rusa sospechosa de formar parte del círculo criminal Janus, James Bond (Pierce Brosnan) termina descubriendo un complot para utilizar una vieja arma creada durante la Guerra Fría llamada "GoldenEye", una suerte de satélite que desahabilita y hace estallar todos los aparatos electrónicos de la zona donde golpea. Sin embargo, pronto James descubrirá que todo este operativo se relaciona con uno de sus fracasos más notorios durante la Guerra Fría, donde el agente 006 (Sean Bean) fue asesinado a quema ropa por un perverso general ruso...

Hablemos un segundo sobre Pierce Brosnan como James Bond. ¿Recuerdan la metáfora que hice en On Her Majesty's Secret Service sobre los sujetos bien vestidos que llegaban a una fiesta? Connery era el cretino que se llevaba a la mitad de las chicas golpeándolas en el trasero, Lazenby el sujeto más interesante del mundo que habla de cosas cultas... Bueno, Brosnan es el cuarenteañero que llega tarde a la fiesta en una limusina, con el mejor traje de todos, repartiendo champaña y guiñando a medio mundo y quitándote a todas las chicas que quedaban disponibles. Y no puedes odiarlo, porque, por alguna razón, te cae bien. Es gracioso, simpático, guapo, todo lo que no eres tú... y ahí estás, de nuevo, con tu trago solitario, preguntándote porque no estás en tu casa jugando Team Fortress 2 con tus amigos, y de pronto tienes el celular y estás llamando a tu ex y... Wait, historia equivocada.

Brosnan muchas veces se ha tratado como la combinación perfecta de los anteriores Bond, pero creo que es más que eso: es tu Bond ganador, de comercial, de sonrisa Pepsodent, que incluso montando un tanque mantiene el estilo y la gracia. Y aunque en algunas de las tres posteriores esto jugaría en su contra, en Goldeneye funciona a la perfección, porque sigue habiendo una pisca de humanidad que lo hace un héroe entrañable, y eso es porque la historia elegida para contar es bastante personal. Aunque involucre un satélite asesino.


No quiero entrar en spoilers, pero los villanos de esta película son todos excepcionales. Hay una "anti chica Bond", la espía rusa, que se roba cada segundo de pantalla que ocupa... a pesar de que me recuerda a otra villana Bond de una cinta menos conocida, "On Her Majesty Secret Service", ¡pero hey, sigue siendo un placer de ver! El general ruso también tiene su dosis de personalidad... Sin embargo, el que se roba la pantalla totalmente es el tercer villano. Probablemente sepan quien es, pero sino han visto la película, es una agradable sorpresa, porque es de los mejores villanos que ha tenido la saga, justamente, porque ataca un área personal de Bond, y lo vuelve más vulnerable. Esta es la parte que lo vuelve humano.

La humanidad también aparece con la nueva chica Bond, con la que tiene alguna de las conversaciones que más profundidad han dado al personaje de 007. Esos momentos sin duda son bienvenidos.

Prácticamente todos los elementos clásicos de las James Bond están presentes: Q con sus inventos y su automóvil, quien aparece en una extremadamente cómica presentación, MoneyPenny, quien en un buen giro ya no cae con tanta facilidad en los encantos de Bond, incluso amenazándolo en broma por acoso laboral, y por supuesto... M. Ahora, yo crecí con Judi Dench como M, por lo que estoy acostumbrado, pero sin duda fue curioso verla asumir el rol tras una saga de Ms Hombres. Y no llega simplemente a decir "miren, cambiamos de sexo al personaje", inyecta toda una nueva energía y vitalidad a esta área de la película. Ella no esta para juegos con Bond, inmediatamente lo insulta tratándolo de dinosaurio misógeno de la guerra fría.

Sin duda el fuerte de esta película es la acción, porque holy shit si que subimos el nivel. Esta es una de las más desproporcionadas pero, al mismo tiempo, bien filmadas cintas de acción de la saga Bond. En general, esta justo en ese excelente límite entre lo épico y lo ridículo pero quedándose más en lo épico. Sí, hay una secuencia que involucra a Bond tirándose a un acantilado para encender un avión en el aire que no tiene ni pies ni cabezas, pero, ¡hey! ¡Bond en una persecución automovilística EN UN TANQUE! ¡EN UN TANQUE! HOW COOL IS THAT!? Y a Brosnan no se le mueve un pelo en estos momentos.

Asesinando con estilo

La historia en sí misma es interesante y bastante intrigante, particularmente respecto al tercer villano, y aunque nunca he sido un gran fanático de todo ese show de los "satelites asesinos", puedo dejarlo pasar porque al final pasa a ser un elemento casi secundario en la película. Así que, aunque sigo haciendo un gesto de disgusto cuando el general ruso saca GoldenEye, creo que pudo ser peor. La buena noticia es que NUNCA más volvimos a toparnos con un satelite asesino en la saga Bo... ¿qué? ¿QUE ES ESO DE DIE ANOTHER DAY? Bueno, espero que no sea dos películas más. Tres.

Como sea, GoldenEye es un gran añadido a la saga Bond. Diría que un poco larga, pero es tan entretenida, incluso en los momentos en que no estamos siguiendo a James, que no puedo quejarme. Si no la han visto, y quieren saber como fue la llegada de Brosnan a la saga 007, este es un buen lugar para partir, ¡e incluso, es un buen lugar para partir la saga si no quieren ir demasiado hacia atrás en el tiempo! Ahora... ¿qué aventuras satelitales esperarían a Brosnan en el futuro? ¿Mantendrían la calidad las secuelas de los años venideros? Pues...

Atentamente,
Farfaramir, el Cliffhanger

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